01/01/2023
Sunday
10 sept 2025
Cuando pensamos en Torrevieja y la Costa Blanca, lo primero que suele venir a la mente es el verano: sol abrasador, playas llenas y resorts bulliciosos. Pero quienes llegan aquí en otoño o invierno descubren un mundo muy diferente: tranquilo, luminoso y sorprendentemente rico en experiencias.
Clima suave y mar sin multitudes

En otoño la temperatura del aire sigue siendo agradable, y en invierno rara vez baja de los +12 °C. El sol brilla la mayor parte de los días, y el mar, aunque más fresco, sigue invitando a pasear por el paseo marítimo. Las playas se vuelven amplias y silenciosas, lo que permite disfrutar de la naturaleza sin el ajetreo habitual del verano.
Festivales y celebraciones
En esta época del año el calendario regional se llena de eventos culturales:
En octubre, Torrevieja acoge fiestas de otoño y festivales benéficos con música y gastronomía.
En noviembre y diciembre, en pequeños pueblos de la Comunidad Valenciana se celebran ferias rurales y festivales gastronómicos tradicionales. Por ejemplo, la Feria de la Manzana Esperiega en Rincón de Ademuz.
En invierno cobra vida Ibi, donde tienen lugar las Fiestas de Invierno, con coloridos desfiles, bailes y divertidas batallas de harina y huevos.
Y los desfiles y celebraciones navideñas en Alicante, Valencia y la propia Torrevieja convierten las calles en un auténtico cuento de hadas.
Naturaleza y actividades al aire libre

El otoño y el invierno son ideales para pasear en plena naturaleza. Las lagunas saladas de La Mata y Torrevieja resultan especialmente pintorescas en esta época: allí se concentran bandadas de flamencos y aves migratorias. En las sierras de la Costa Blanca es un placer recorrer senderos, disfrutar de los colores dorados de las hojas, recoger castañas o visitar pequeños pueblos donde la vida transcurre de manera pausada y tradicional.
Los amantes de la historia pueden visitar antiguas torres como la Torre del Moro en Torrevieja o la Torre Cabo Roig en Orihuela Costa, así como hacer una excursión a Guadalest, uno de los pueblos de montaña más pintorescos de España, con su castillo y espectaculares miradores.
Cultura y gastronomía

Los meses fríos son el mejor momento para los museos. En Torrevieja funciona el Museo del Mar y de la Sal, que cuenta la historia de la pesca y las salinas. En las ciudades de la región cobran vida los teatros y auditorios: estrenos, exposiciones, música de cámara.
La gastronomía de otoño e invierno es un placer especial. En los restaurantes locales se sirve el caldero, un contundente plato de arroz y pescado, y los precios son notablemente más bajos que en verano.
Ocio familiar
Para los niños, la temporada otoñal e invernal también está abierta. En Torrevieja funciona el Parque de las Naciones, un amplio espacio con zonas de juegos. En cafeterías y centros comerciales hay áreas infantiles y rincones de entretenimiento. Y los paseos por el paseo marítimo o dar de comer a los patos en los parques se convierten en actividades sencillas pero llenas de alegría.
Tiempo de descubrimientos tranquilos

El otoño y el invierno en Torrevieja y Orihuela Costa son momentos en los que la región muestra su verdadero rostro. No hay ruido, ni calor, ni aglomeraciones de turistas. En cambio, hay sol suave, cultura viva, festivales coloridos, paseos por la montaña y el mar, cenas acogedoras y la oportunidad de sentirse no como un turista, sino como un habitante de esta tierra maravillosa.Y quizá sea precisamente en esta temporada cuando la Costa Blanca se revela de verdad.
Festividades en Torrevieja en otoño e invierno
9 de octubre — Día de la Comunidad Valenciana (festivo)
12 de octubre — Fiesta Nacional de España (festivo)
1 de noviembre — Día de Todos los Santos (fiestas de disfraces)
6 de diciembre — Día de la Constitución (festivo)
8 de diciembre — Inmaculada Concepción (festivo)
25 de diciembre — Navidad (25 y 26 festivos, mercadillos, desfiles)
1 de enero — Año Nuevo (fuegos artificiales, mercadillos)